ESTRUCTURA Y COYUNTURA
Ante el fracaso evidente de la administración de Aispuro en materia de infraestructura y desarrollo económico, se recurre en el último año de gobierno a vender expectativas, para lo cual se retoman la visión e intenciones de gobiernos anteriores, que fueron interrumpidas por la actual administración aisupurista, como el Corredor Económico del Norte de México, y la proyección de la infraestructura para la creación y operación del “puerto seco”.
El año pasado (2020) en un vano afán de sumarse a un frente opositor al Gobierno de México, ha sido un claro error de estrategia del gobernador Aispuro el haber abandonado la CONAGO para integrarse a una efímera y fallida “Alianza Federalista”.
Recordemos que como consecuencia de la transición democrática y, su correlato, la descentralización y redistribución del poder político en México, el 13 julio del 2002 los gobernadores de los estados mexicanos constituyeron la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO). Con la CONAGO el federalismo mexicano estableció nuevas formas y mecanismos de coordinación interestatal e intergubernamental en extensas zonas del país, a fin de profundizar la descentralización de recursos y la ejecución de proyectos de gran visión, con alcance e impacto en el crecimiento económico y el desarrollo regional.
Fue en el seno de la CONAGO donde el anterior gobernador Herrera Caldera estableció las bases de la coordinación intergubernamental e interestatal con las entidades federativas que conforman el gran Corredor Económico del Norte, con la concurrencia de los estados de Sinaloa, Durango, Zacatecas, Chihuahua, Coahuila, Tamaulipas y Nuevo León, con la intención y voluntad de compartir retos y oportunidades, coincidiendo plenamente en el propósito de construir una visión estratégica regional común.
El megaproyecto detonante de esta sinergia de esfuerzos intergubernamentales y empresariales de los estados del Corredor Económico del Norte, lo constituye la supercarretera Durango-Mazatlán, en el eje transoceánico que atraviesa, desde el puerto de Mazatlán, las ciudades de Durango, Torreón, Saltillo, Monterrey y Matamoros; a su vez se buscaba mejorar la conectividad interestatal de las ciudades de Chihuahua y Zacatecas.
Se trata de propiciar el desarrollo a mediano y largo plazo de una gran red interestatal de infraestructura física y logística para conectar eficientemente los mercados de Asia-Pacífico, con América del Norte y la Unión Europea, a través del Golfo de México.
El eje transoceánico debe abrir oportunidades económicas para los siete estados firmantes y participantes en las acciones conjuntas del Corredor Económico del Norte, ya que reducirá distancias, costos y tiempos de traslado de 18 a 12 horas, y se convertirá en la ruta interoceánica más corta y competitiva.
Entre las potencialidades y ventajas de esta macrorregión Norte, están:
- La contribución económica conjunta de los siete estados equivale a más del 21% del PIB del país, y en ello se genera el 27 % de la producción nacional de la industria manufacturera y se ubica el 58% de la industria exportadora, siendo también una de las regiones con los más grandes productores de alimentos en la nación.
- En el extenso territorio de los siete estados habitan 20 millones de personas, lo que representa un mercado interno atractivo para la inversión y el consumo, donde además se concentra más del 60 por ciento del flujo de comercio internacional de América del Norte, y los siete estados disponen de mano de obra calificada y de distintas instituciones educativas de nivel superior, de prestigio internacional, lo que ha favorecido la especialización productiva y una creciente integración con el mercado global de América del Norte.
En aquel momento (2012) los gobernadores de los siete estados, coincidieron en impulsar una agenda estratégica conjunta, que consiste fundamentalmente en:
1) Elaborar el Plan Maestro de Infraestructura y Desarrollo Económico Regional del Corredor Económico del Norte (CEN); 2) Suscribir con el Gobierno Federal un convenio en materia de desarrollo regional e infraestructura del CEN en congruencia con el Programa Nacional de Infraestructura 2007-2012; 3) Impulsar políticas eficientes y eficaces de inversión, empleo, medio ambiente y turismo, en un marco de sustentabilidad en beneficio de la población de los 7 estados, con una visión regional y una agenda estratégica común; 4) Promover la construcción, expansión y consolidación de la infraestructura económica estratégica del CEN, con énfasis en la infraestructura carretera, ferroviaria, portuaria, multimodal y de telecomunicaciones, así como el desarrollo y fortalecimiento de los parques industriales, tecnológicos y logísticos de la región.
Entre los proyectos estratégicos de infraestructura se mencionaban: la ampliación y modernización del Puerto de Mazatlán, para que opere como puerto de carga, en un esquema de inversión público privada y la construcción del tramo ferroviario Mazatlán-Durango, el cual, consolidará el desarrollo comercial de la región. Finalmente, se instituiría la celebración de una Conferencia Bimestral del Corredor Económico del Norte, de manera rotativa en cada uno de los estados, con la participación de autoridades de los tres órdenes de gobierno; legisladores federales y locales; empresarios, inversionistas nacionales y extranjeros e instituciones de educación superior.
El Corredor Económico del Norte posibilitaría el mejor aprovechamiento de recursos regionales para desarrollar mega proyectos de alcance regional e impulsar la cooperación político-administrativa interestatal para el crecimiento y desarrollo de los 7 estados. Lamentablemente, estos esfuerzos fueron descontinuados, y han sido retomados demasiado tarde para la administración de Aispuro.