El gobierno mexicano sí puede disponer del depósito extraordinario que recibirá el país del Fondo Monetario Internacional (FMI) esta semana, conforme a la instrucción de la Junta de Gobernadores del organismo, y en estricto apego a lo que dicta el Tratado de Bretton Woods, advirtió el exdirector general Jurídico del Banco de México, Francisco J. Moreno y Gutiérrez.
Entrevistado por El Economista, detalló que los Derechos Especiales de Giro (DEG) que hoy asignará el FMI a los países miembros como México, conforme la decisión de la Junta de Gobernadores, “pertenecen legalmente a cada estado porque además están referidos sobre las cuotas pagadas por cada país, que son pagadas por el Estado mexicano”.
El receptor legal del depósito es el Estado, subrayó. Su destino entra dentro del ámbito de competencia del Estado mexicano que está representado al gobierno federal.
No obstante, detalló que los DEG que recibirá México por un valor equivalente a 12,200 millones de dólares, no funcionan en sí mismos como una moneda de cambio.
“(Los DEG) No tienen valor para particulares ni entidades financieras, pero esto no significa que no puedan canjearse por divisas de libre curso internacional, como es el dólar de Estados Unidos o cualquier otra divisa”, precisó.