SEXTANTE
¡No hay que abusar!, pedimos apoyo con vacunas y al mismo tiempo “elucubramos”, ¿Cómo le podemos hacer para darle la vuelta a los acuerdos que tenemos?, cuidado, en el momento más inesperado el destino nos va a alcanzar.
Dependemos tanto del camino que siguen los EEUU en su recuperación económica, que si le razcamos mucho la panza al tigre (lease T-MEC), nos puede tirar un manotazo. La balanza comercial en febrero, reportó un superavit de 2,500 millones de dólares, aunque el porcentaje de exportaciones hacia el vecino país del norte, se redujo marginalmente. Esto causó una caída, al tercer lugar, como socio comercial con Estados Unidos, atrás de China y Canadá.
Ya casi acabamos de vivir el primer trimestre del año, iniciando con un precario crecimiento en enero de 0.1% (las predicciones de hacienda son de 4.6% en el año, a este paso… ¿pos cómo?) y estamos ocupados en: si le dan o nó la candidatura a Salgado Macedonio, o si la selección nacional va a ir a las olimpiadas. ¡Vaya concentración la nuestra!
La frase “..México, tan cerca de Estados Unidos”, que no la dijo Porfirio Díaz sino José Nemesio García Naranjo (1883– 1962) no nos gusta, pero cómo nos ha ayudado a través de los años en materia económica, y hoy más que nunca, debemos manejar esta relación de manera muy profesional y rentable. México pertenece ya a la cadena de valor de los productos americanos.
Por muy pocos lados se perciben programas de apoyo a la industria, o de inversión en reparar la vieja infraestructura con que contamos. La grán decisión sería pedir prestado a las bajísimas tasas que prevalecen en el mercado (en los paises desarrollados van de 0% hasta -1%), sacrificando un deficit presupuestal, para invertir en un mayor crecimiento económico.
Todo parece apuntar a que, por más que intentemos acabárnoslo, nuestro México es más que un grupo, y prevalecerá.
Nota: El último reporte de INEGI, muestra que en Durango cerraron 16.1% de los negocios formales en un año, menor que el 17.4% nacional y posicionandolo en el lugar 9 con el menor porcentaje. Los esfuerzos locales comienzan a ser decisivos para lograr una dinámica positiva en la generación de riqueza.